Análisis de Alejandro Delmás sobre Wimbledon
El especialista en tenis de AS comenta cómo ve el torneo londinense ahora que Rafa Nadal está eliminado.
Tras el terremoto que es la eliminación de Rafa Nadal a manos de Lukas Rosol, número 100 del mundo, la conclusión más importante es que la zona del cuadro por donde transitaba Rafa queda totalmente abierta. Desde 2005 (Gilles Muller) no perdía Nadal en Wimbledon antes de la final. En esa parte baja del cuadro masculino sobrevive un racimo de buenos jugadores como candidatos a jugar semifinal con Andy Murray… en el caso de que este supere batallas como la que mantuvo con Ivo Karlovic. El cruce de mañana entre David Ferrer y Andy Roddick quizá decida el aspirante con más peso para plantarse en ese penúltimo turno ante Murray, aunque el ganador puede tener que verse con Del Potro. Por la parte baja también anda Tsonga, que se vio muy apurado por García López.
La parte de arriba parece condenada a una semifinal entre Roger Federer y Novak Djokovic. Ahora sí, y tras el KO de Nadal, parece que a Federer se le abre una doble ocasión de oro: para obtener su séptimo título en Wimbledon y recuperar el número uno del mundo, Roger ya no tendrá que batir sucesivamente a Djokovic y Nadal, que han ganado nueve veces a Federer en sus diez últimos duelos directos en Grand Slam: Nadal, 5-0; Djokovic, 4-1.
Bajo estas premisas, a Federer se le presenta una grandísima oportunidad… aunque con Djokovic en mitad del camino de Roger, como una roca adoquinada. Andy Murray también se halla ante una excelente ventana para divisar la final, pero el torneo ha quedado muy abierto y tampoco Andy se encuentra en su mejor momento de forma. Puede concluirse que a Federer se le presenta una gran ocasión y que tiene casi el deber de aprovecharla. Si no lo hiciera ahora Roger, quizá no se vería nunca ante otra igual en Wimbledon.