"No he sido agresivo y he fallado más de lo habitual". Transparente como pocos, Rafael Nadal reconoció tras su derrota en el Open Banc Sabadell de Barcelona que, pese a los buenos momentos dejados en Montecarlo, su difícil escalada en persecución de las sensaciones perdidas todavía se encuentra en un punto de desarrollo.

Dolió, y mucho, el adiós en octavos de final ante el italiano Fabio Fognini. Así lo dejó entrever el manacorí, manifestando que "estaba convencido de que la situación de altibajos por la que pasé estaba superada, pero veo que no". Además, fue claro al señalar uno de los posibles puntos de mejora: "Me falta potencia y velocidad, y cuando ocurre todo eso soy un jugador vulgar".

Nadal, que permanecerá en Mallorca antes de viajar a Madrid para participar en el Másters 1.000 de la primera semana de mayo, afrontará así el que será su penúltimo campo de pruebas antes de participar en una de las citas favoritas de su agenda: Roland Garros.

Y pese a que los constantes altibajos de juego del tenista mallorquín invitan a pensar más en su búsqueda de confianza, casas de apuestas deportivas como Sportium ya han lanzado diversos mercados de cara a la pelea por la Copa de los Mosqueteros. Novak Djokovic sería el gran favorito a alzarla en la Phillipe Chatrier con una cuota 2.10. Que lo haga Nadal se pagaría 3 a 1.

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