Phil Laak pierde su récord del mundo a la partida de poker más larga

Phil “The Unabomber” Laak ha perdido su récord del mundo a la sesión de poker más larga. El responsable de la hazaña es un ex soldado del ejército británico llamado Barry Denson. En el ejército te enseñan a aguantar sin dormir, a dormir de pie e incluso a dormir mientras marchas, pero dudo mucho que te entrenen para aguantar 120 horas y 20 minutos jugando al poker en el G Casino de Manchester.

Con este nuevo registro, Denson ha batido el récord de Laak en más de 5 horas y comentó los detalles de su particular entrenamiento.

Me preparé para este reto acortando mi sueño de manera gradual durante semanas hasta llegar a dormir menos de tres horas al día. Esta preparación me ayudó mucho”.

No hay que olvidar que Denson podía descansar 5 minutos cada hora, pero a pesar de esos pequeños parones, el cuerpo no está preparado para tanto tute.

Yo sabía que iba a tener efectos secundarios. Tras conseguir su récord, Phil Laak había comentado que tuvo alucinaciones visuales. Mi experiencia fue un poco diferente, ya que yo tuve alucinaciones auditivas. En algunos momentos llegué a estar convencido de estar escuchando a través de las rendijas del suelo y de las ranuras de la puerta cómo unos niños jugaban y reían”.

Denson intentó ponerse en contacto con Laak antes y después de batir el récord para compartir la experiencia, pero el jugador profesional no le ha respondido. Sin embargo, ambos desafíos tienen mucho en común.

Durante la sesión de más de 120 horas, Denson recaudó 850£ para Help For Heroes (H4H), una organización benéfica destinada a ayudar a los soldados británicos que han sido heridos desde el 11 de septiembre 2001. Laak también jugó por una causa benéfica cuando batió el récord en 2010. Jugó una partida de cash 10$ / 20$ en el Bellagio en Las Vegas durante 115 horas y donó los 6.766$ que ganó a campsunshine.org.

El récord todavía no ha sido confirmado por Guinness World Records, pero Denson lo tiene todo grabado en vídeo y espera que la confirmación sea un mero trámite. Sin embargo, Guiness World Records es muy estricto con sus condiciones y es pronto para vender la piel del oso. Antes de comenzar el desafío Denson realizó las siguientes declaraciones:

Uno de los mayores retos será encontrar suficientes jugadores para jugar conmigo. Guinness World Records sólo permitirá al resto de rivales en la mesa jugar un máximo de cuatro horas, por lo que necesitaremos tantos jugadores como sea posible, sobre todo a primera hora de la mañana”.

Al final hubo jugadores de sobra y Denson consiguió batir el récord, aunque de momento no sea oficial.

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